Enguerran CHARLOPAIN, Product Manager de Algo’Tech, comparte hoy su experiencia sobre un tema de gran relevancia estratégica y actualidad: la continuidad digital de los datos.
Actor clave en la transformación digital de los negocios de electricidad y mantenimiento, Algo’Tech ofrece software, experiencia y servicios de alto nivel en los campos de:
- diseño, explotación y gestión de esquemas eléctricos
- gestión de datos, documentos y procesos técnicos de las profesiones de mantenimiento
Háblenos de los retos actuales en la continuidad digital de los datos
Hoy en día, las empresas y las administraciones públicas se enfrentan a la explosión tanto de los volúmenes de datos y contenidos digitales no estructurados o semiestructurados como de su diversidad, ya que proceden de documentos ofimáticos (textos, tablas), aplicaciones empresariales (portales, intranets, extranets, sitios, macros de Excel, Access y otros ERP), documentación técnica, etc.
Por tanto, en nuestra economía moderna debemos ser capaces de manejar información digital de todo tipo. Además, las diversas reglas y normas que rigen la Construcción y la Fábrica 4.0 exigen que demos cuenta de la información relacionada con el capital intelectual de la empresa. Por ello, se hace necesario estructurar los datos de la empresa, que constituyen la base de la creación de valor.
¿Cómo definiría la continuidad digital?
La continuidad digital, para la Fábrica 4.0, no es otra cosa que su capacidad para preservar la información digital de manera que siga estando disponible, según sea necesario, a pesar de los cambios en la tecnología digital. Se centra en garantizar que la información siga estando siempre completa, disponible y, por tanto, utilizable.Para garantizar la durabilidad y accesibilidad de los datos, el enfoque adoptado debe ser “de principio a fin“: el ciclo de vida de una máquina, por ejemplo, no termina cuando se entrega al cliente, ni se detiene al cambiar de ubicación o de propietario, o por el capricho de un gestor negligente.
¿Cuál es la relación entre Lean y la continuidad digital?
Dado que las empresas se enfrentan a una competencia cada vez más dura y a unas exigencias de los clientes cada vez más complejas, necesitan mejorar continuamente su rendimiento.
Como hemos visto en este blog, establecer un proceso de Mejora Continua, que valore al equipo, y por tanto al ser humano, es el primer paso en este empeño y se apoya en gran medida en los datos de campo. Conseguir que los empleados reconozcan el valor de los datos que les rodean cada día constituye uno de los principales objetivos del Lean Management.
La información comunicada por los operarios de primera línea permite identificar los obstáculos y, por tanto, definir las áreas a reajustar para mejorar la producción tanto en términos de calidad como de cantidad. Ningún cambio puede realizarse sin bases sólidas y datos de referencia, por lo que los datos de campo son fundamentales en las empresas industriales.
La recopilación de datos de campo sigue siendo hoy en día la respuesta a las normas y reglamentos cada vez más complejos. Las observaciones de todo tipo sobre cualquier dificultad encontrada, las posibles lagunas no detectadas en los indicadores o la información relacionada con su corrección son datos valiosos que deben analizarse para mejorar la capacidad de reacción de la empresa y justificar cambios en los procesos existentes, como la introducción de una nueva forma de comunicación con los empleados (mediante vídeos, redes sociales, asistencia a distancia de expertos), una nueva formación, etc.
Por lo tanto, hay que dar prioridad a la documentación y la recopilación de información, que también debe abarcar todos los cambios que sufrió el activo, así como las decisiones que se tomaron para optimizar su ciclo de vida. Por ejemplo, en el caso de una máquina compleja, debe haber una visibilidad exhaustiva de la composición del material, toda la información necesaria para la explotación de la máquina y los registros de todos los cambios que la llevaron a su estado actual (“quién, qué, cómo, dónde, por qué”).
Hoy en día, cada vez más especificaciones de los sistemas exigen que nos comprometamos con los costes de mantenimiento. Lo que resulta inviable si se produce una interrupción en la continuidad de la información tras la entrega, o durante la vida de la máquina (pérdida de archivos, documentos de choque, etc.).